Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales

Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco

ISSN 2347-081X

http://www.revistas.unp.edu.ar/index.php/textosycontextos

2021. Núm. 9. 117-139

Ambigüedad y orden de palabra

Un estudio de casos

Ambiguity and Word Order: A case study

María Inés Quevedo

inesquevedo@yahoo.com.ar

UNPSJB

Mayra Petroff

may.petroff@yahoo.com.ar

FHCS-UNPSJB

Fecha de recepción: 19 de abril de 2021

Fecha de aprobación: 12 de julio de 2021

Fecha de publicación: 31 de julio de 2021

Para citar este artículo: Quevedo, María Inés y Petroff, Mayra (2021). Ambigüedad y orden de palabra: Un estudio de casos. Textos y Contextos desde el sur, Número 9, 117-139.

Resumen

En este trabajo, a partir del análisis de tres enunciados reales cuya lectura resulta ambigua, vamos a describir algunos elementos del sistema de la lengua que favorecen la lectura de enunciados estructuralmente ambiguos. En tal sentido trabajaremos sobre, el orden de palabra en el enunciado, la jerarquía de los constituyen, en estos casos, son todos adjuntos, por lo tanto no seleccionados por la palabra núcleo de la construcción, por una parte. Pero, por otra parte, se presentan en un entorno de inespecíficidad.

En función de esto, en la primera parte del trabajo, nos avocamos a describir estos factores lingüísticos que postularemos han posibilitado que se establecieran más de una lectura para estos enunciados.

En la segunda parte vamos a discutir que la posibilidad de la lectura ambigua en un cotexto de inespecificidad de los SSNN tanto nucleares como aquellos modificadores adjuntos, también radica en la noción de mando de constituyen (Reinhart,1976) y si bien se presenta como un factor determinante, es la interacción de la jerarquía de los constituyentes analizados y su interfaz sintáctico-semántica lo que en el orden lineal favorece la interpretación ambigua

Abstract

This paper describes some language system elements that favor reading from ambiguous structural expression as of the analysis of three real expressions of which reading is ambiguous. To that effect, this paper will enhance, on the one hand, on the expression word order, the hierarchy of the constituents, which in these cases are all adjuncts, therefore they are not selected by the nucleus word of the construction, although they are presented on non-specific context.

Based on the above, the first part of this paper will describe the linguistic factors that have made possible more than one reading for these expressions.

On the second part it will be discussed the possibility of ambiguous reading in a non-specific context of the noun phrases, not only nuclear but also adjacent modifiers. It also lies in the notion of c-command (Reinhart, 1976) and although it is presented as a determining factor, it is the interaction of the hierarchy of the analyzed constituents and their syntactic-semantic interface, which in the linear order favors ambiguous interpretation.

Palabras claves

Ambigüedad, Inespecificidad, Constituyentes adjuntos, Mando de constituyentes, Alcance.

Key words

Ambiguity, Non-specific, Adjunct constituents, C-command, Scope.

Introducción

Los siguientes enunciados, despojados de su contexto situacional de enunciación, poseen lecturas ambiguas:

(1) Botas de piel de niño.

(2) Bicicletas de balance para niños de madera.

(3) Jabón corporal en barra para niños con forma de hipopótamo.

Analizaremos estos tres enunciados producidos por hablantes en contextos reales como casos de ambigüedad estructural para determinar qué elementos del sistema de la lengua favorecen este tipo de lecturas.

En su Diccionario de Lingüística Moderna Alcaraz Varó y Martínez Linares (2008) definen a la ambigüedad como “la peculiaridad de algunos enunciados consistente en que son susceptibles de dos o más interpretaciones”.

Estos autores describen dos tipos de ambigüedad, la léxica y la estructural. La primera se relaciona con aquellos ítems léxicos polisémicos, por ejemplo, banco, que puede hacer referencia tanto a la institución financiera como al sitio para sentarse. La segunda se origina en la posibilidad de interpretar de diferentes maneras las conexiones sintácticas entre los constituyentes de un enunciado. Los ejemplos con los que trabajaremos pertenecen a este segundo grupo.

El corpus, compuesto por tres enunciados, tiene un fin informativo por tratarse de descripciones de productos para la venta. Esto permite deducir que el hablante enunciador no pretendió una doble lectura para su enunciación. Sin embargo los hablantes- receptores del mensaje pueden considerarlos humorísticos porque en ellos se pueden interpretar otro sentido. De modo que nos proponemos dilucidar en este trabajo qué elementos del sistema lingüístico presentes en ellos son los que habilitan la ambigüedad en su interpretación. Describiremos su contexto de enunciación en primer lugar. Luego describiremos los elementos lingüísticos que asumimos son factores que producen la interpretación ambigua. Y por último a partir de este análisis aportaremos algunas conclusiones al respecto de las relaciones entre jerarquía sintáctica y orden lineal

Descripción y contextualización de los enunciados

El primer enunciado es una frase que describe un producto para su venta, dirigida a los clientes de una zapatería. El contexto comunicativo de este enunciado es un cartel adherido en la vidriera del local, acompañando su exhibición en cuestión:

(1) Botas de piel de niño1.

El enunciado de (1) tiene dos interpretaciones: la primera es que en esa zapatería se venden botas confeccionadas con piel para ser usadas por niños, asumimos que es la intención comunicativa del hablante emisor; mientras que la segunda lectura es que el material que compone las botas es piel extraída de niños, lectura ambigua que puede interpretar el lector. En tal sentido es el contexto situacional el que hace más aceptable y normal la primera lectura. En todos los casos que estudiaremos ocurre lo mismo; pero lo que nos interesa es ver cuáles son los elementos del sistema de la lengua que nos permiten la interpretación ambigua.

El segundo enunciado se halla inscrito en un cartel ubicado en la góndola de un negocio. El enunciado informa a los clientes el precio de un producto y describe sus características más relevantes:

(2) Bicicleta de balance para niños de madera2.

También de este enunciado podemos realizar dos lecturas: la primera es que el producto es una bicicleta hecha de madera cuya finalidad es que los niños aprendan a mantener el equilibrio. La segunda lectura es que se trata de una bicicleta destinada a niños “de madera” en sentido figurado3.

El tercer enunciado se halla impreso en el empaque de un jabón y cumple la función de informar a los usuarios las características de este producto:

(3) Jabón corporal en barra para niños con forma de hipopótamo4.

La primera interpretación es que se trata de un jabón sólido que tiene forma de hipopótamo y cuyos destinatarios son los niños. La segunda lectura es que los usuarios específicos de este jabón son niños con forma de hipopótamo. Dichos enunciados despojados de su contexto, el aquí y ahora de la enunciación, presenta de manera estructura una ambigüedad.

Linealidad y jerarquía

Asumiremos que unos de los factores que producen la ambigüedad es el orden de palabra del enunciado, la linealidad es un principio de las lenguas. En su artículo “La materialidad en el lenguaje”, E. Bibiloni (2020) se propone indagar sobre aquellos aspectos concretos, tangibles del lenguaje. Saussure (2005), en el Curso de Lingüística General, hace referencia a la materialidad del lenguaje al describir al significante fónico como lineal, debido a que no es posible para el aparato fonador realizar dos emisiones lingüísticas simultáneas. Esta característica se ha trasladado a la escritura.

La linealidad, según el autor, implica que el proceso de combinación de elementos sólo pueda realizarse de forma sucesiva, es decir, un elemento después de otro, tal como se representa en el siguiente esquema:

(1.1) […a, b, c, d…]

La linealidad conlleva un tipo de relación que se denomina adyacencia (Bibiloni, 2020), según la cual un elemento se puede vincular con un máximo de dos, uno anterior y otro posterior.

La linealidad está determinada por el factor temporal, dado que la operación de combinar elementos solo puede desarrollarse de forma sucesiva, es decir, adicionando un elemento a la vez. En cada etapa se obtendrá un resultado diferente, producto de la combinación del elemento nuevo con los ya adicionados, como ejemplificamos en (1.2):

(1.2) [a [b [c [d]]]]

A tales productos se los denomina secuencias o sintagmas y a su proceso de construcción, derivación (Bibiloni, 2020).

Como se representa en (1.2), cada nuevo elemento que se selecciona y se combina no lo hace sólo con el inmediatamente anterior, sino con el conjunto de los elementos ya insertados. De este modo cada elemento nuevo que se inserta remite al anterior, ciclo que se repite sucesivamente hasta llegar al inicio. A tales procesos se los llama recursivos.

A la relación instaurada mediante el proceso de recursividad, en sintaxis se la denomina mando de constituyentes, mando-c (Reinhart, 1976). Se dice que el último segmento que se concatena tiene mando-c sobre los anteriores, por eso, el nudo inicial no tiene mando-c sobre ninguno y es mandado-c por todos. Al establecer un nudo inicial aparece la noción de direccionalidad en el caso del español el núcleo precede a sus modificadores como orden obligatorio. Mientras que en otras lenguas ese orden obligatorio es distinto, por ejemplo puede ser que el núcleo se posponga a sus modificadores. Tema de las tipologías de las lenguas que no desarrollaremos.

La primera interpretación de los enunciados (1), (2) y (3) pone en evidencia el funcionamiento del orden lineal y el mando-c de los constituyentes del enunciado que presentan una lectura ambigua. Para comprender con mayor claridad estos fenómenos recurriremos al esquema arbóreo para representar las posibilidades de interpretación. Comenzaremos con la primera interpretación del enunciado (1) esquematizada en (1.3):

(1.3)

Como se puede apreciar en el esquema el elemento inicial, que es el sintagma nominal (SSNN) botas, se ubica en el nivel más bajo. El segundo elemento que se concatena es el sintagma preposicional (SSPP) de piel que manda-c al elemento inicial. Al SSNN botas de piel, producto de la operación combinatoria anterior, se agrega el SSPP de niño, que se ubica en el nivel más alto y tiene mando-c sobre la cadena antes formada. Si bien la relación de mando-c es formal puede ser de utilidad para describir cómo se construyó la primera interpretación de (1): dado que el SSPP de niño manda-c sobre el SSNN botas de piel se comprende que las botas de piel son para niño. Pero ese mismo orden permite, dado el principio de adyacencia de los SSNN niño y piel, la interpretación que las botas son de piel de niño como analizaremos más adelante.

La primera interpretación del enunciado (2) la representaremos en (2.1) en función de su orden lineal:

(2.1)

El elemento inicial es el SSNN bicicleta, al que se concatena el SSPP de balance. Este manda-c sobre el SSNN inicial y la combinación de ambos da como resultado el SSNN bicicleta de balance. En la siguiente derivación se concatena el SSPP para niños y manda-c sobre la cadena antes formada. El resultado de esta derivación es el SSNN bicicleta de balance para niños, de modo tal que en este punto se puede interpretar que la bicicleta de balance está destinada a los niños. Finalmente se deriva el SSPP de madera formando el SSNN bicicleta de balance para niños de madera. El último elemento en combinarse tiene mando-c sobre todos los elementos concatenados anteriormente, con lo cual se entiende que la bicicleta de balance para los niños está construida con madera. En tal orden lineal es posible la interpretación ambigua dada la adyacencia de la dependencia de madera con el SSNN niños (que se analiza más adelante).

De manera análoga es posible representar la primera interpretación del enunciado (3) en el gráfico de (3.1):

(3.1)

El núcleo del enunciado es el SSNN jabón. La operatoria derivacional concatena el SSAA corporal formando el SSNN jabón corporal, por lo que se interpreta que el jabón es para uso específico del cuerpo. Luego se combina el SSPP en barra dando como resultado el SSNN jabón corporal en barra. Este SSPP manda-c sobre la cadena formada, de modo que específica que el jabón corporal se presenta en barra, es decir, es sólido. El SSPP para niños se concatena en otra derivación recursiva y da como resultado el SSNN jabón corporal en barra para niños. En la nueva derivación del sintagma se interpreta que el jabón corporal sólido está dirigido específicamente al público infantil. La última derivación combina el SSPP con forma de hipopótamo, obteniéndose como producto el SSNN jabón corporal en barra para niños con forma de hipopótamo. Dado que el último elemento tiene mando-c sobre los elementos que se concatenaron en etapas anteriores, se puede interpretar que el jabón en cuestión tiene un diseño que asemeja la silueta de un hipopótamo. El mismo orden permite la lectura ambigua dada la adyacencia del núcleo niños al SSPP con forma de hipopótamo.

Aunque las operaciones de selección y concatenación sirven para describir los procesos sintácticos de derivación de enunciados en el uso del lenguaje hablado, son insuficientes; ya que esto no elimina las interpretaciones ambiguas que analizaremos en este trabajo.

A continuación vamos a representar cada una de estas segundas interpretaciones de los enunciados (1), (2) y (3) en un esquema arbóreo para observar el funcionamiento del orden lineal y la relación de mando-c. Comenzaremos con el ejemplo de (1) esquematizado en (1.4):

(1.4)

El esquema de (1.4) muestra que el núcleo de todo el sintagma el SSNN botas, posee solo un adjunto incrustado el SSPP de piel de niño. El orden de palabra permite interpretar, esta vez, que la relación de mando-c, del SSPP de niño manda-c solamente al SN piel, que puede ser su núcleo al cual se adjunta, por lo que se interpreta que la piel es de niño. De ese modo en el orden lineal de la mera adyacencia es interpretable que el SSNN de piel de niño manda-c al núcleo principal botas, así es posible entender que las botas están fabricadas con piel proveniente de niños.

En el esquema arbóreo de (2.2) podemos observar la segunda interpretación del enunciado de (2):

(2.2)

El núcleo del enunciado es el SSNN bicicleta del que se derivan solo dos adjuntos, los SSPP de balance y para niños de madera. Dada la adyacencia del SSPP de madera al SSNN niños, puede entenderse que de madera manda-c el que sería su núcleo adyacente el SSNN niños con lo que se posibilita la lectura en sentido figurado, son los niños los que estarían descriptos.

En el esquema arbóreo de (3.2) representaremos la segunda interpretación del enunciado de (3):

(3.2)

El nombre jabón es el núcleo de todo el sintagma. En esta lectura solo se interpretan tres adjuntos, el SSAA corporal y los SSPP en barra y para niños con forma de hipopótamo. En este esquema interpretativo el mandoc del SSPP con forma de hipopótamo dada su adyacencia alcanza solo al SSNN niños. Esto posibilita la interpretación de que la forma de los niños se asemeja a la de un hipopótamo.

De las observaciones realizadas hasta este punto podemos concluir que si el orden lineal fuera el único factor que los hablantes tuvieran en cuenta para interpretar los enunciados, no sería posible evitar la ambigüedad estructura en el orden lineal de palabra. Sin embargo, es posible realizar más de una interpretación, lo que nos indica que en ellos se pueden establecer distintas conexiones sintácticas que no están explícitas en el orden lineal, sino que son subyacentes.

La “peculiaridad” (Alvaraz Varó y Martínez Linares, 2008) de interpretaciones ambiguas en los enunciados de (1), (2) y (3) nos indican que existen conexiones sintácticas subyacentes entre los elementos. Es aquí donde entra en juego el orden jerárquico, en el cual intervienen las condiciones materiales de los elementos lingüísticos y las decisiones que toman los hablantes.

En el orden jerárquico los elementos no se estructuran a partir de un elemento inicial, sino de aquel que cumple con ciertas condiciones materiales para constituirse en núcleo (Bibiloni, 2020), tal como se representa en (4), donde el núcleo es [b]:

(4) [a [[b] c]]

La noción de núcleo se puede definir, según Hjelmslev, como un elemento constante en la combinación, en el sentido que es equiparable a toda la estructura. Al igual que en el orden lineal, en el orden jerárquico es posible establecer la relación de mando-c pero no se produce de la misma manera, porque puede haber órdenes parciales donde no todos los elementos estén bajo el mando-c.

El tipo de relaciones sintácticas a distancia, mandoc no son tan habituales en las lenguas del mundo debido a que implican un mayor costo de procesamiento para el hablante en comparación con las relaciones lineales. Moreno Cabrera (1991) lo explica en el principio de contigüidad sintagmática, el cual afirma que “los elementos relacionados sintagmáticamente presentan una acusada tendencia en las lenguas del mundo a aparecer contiguos”5. Esto significa que los elementos que mantienen un vínculo sintáctico suelen estar adyacentes.

Por dicho motivo el orden lineal permite la lectura ambigua de los constituyentes dada la adyacencia de modificadores a posibles núcleos. Como el caso del enunciado (1) en que para el modificador de niño dada su adyacencia al nombre piel y su mandoc sobre el SN botas, es posible, en el procesamiento cognitivo del hablante, interpretar como núcleo de niño a piel por adyacencia; mientras que la relación sintáctica de mandoc sobre botas exige un mayor procesamiento. En tal sentido la explicación aplica para los casos de (2) interpretar a bicicleta como núcleo del modificador de madera es una relación de mandoc; por ello es factible una interpretación ambigua sobre el modificador de manera con mandoc sobre niños que es encuentra en adyacencia Si esto es así, esta descripción puede brindarnos una clave para comprender por qué a partir de enunciados emitidos, con un fin pragmático, se pueden producir interpretaciones ambiguas.

El orden lineal no es suficiente, ni el único para organizar las relaciones de concatenación de los sintagmas, existe en tal sentido un orden jerárquico (núcleo, modificadores) que se manifiesta no solo en la linealidad del lenguaje sino por medio de procesos de interfaz con otros niveles lingüísticos que iremos desplegando en los siguientes apartados de nuestro análisis.

En el siguiente apartado, vamos a indagar cuáles son los elementos subyacentes que permiten establecer distintas conexiones sintácticas al interior de un sintagma, las cuales dan como resultado un orden jerárquico, cuya interfaz con el orden lineal podría explicar estas diferentes interpretaciones para un mismo enunciado.

Los modificadores de los SSNN: sintaxis jerarquía de complementos y adjuntos

Las observaciones realizadas por H.H. Müller en su artículo “Los adjuntos como componentes del sintagma nominal” (2000) resultan útiles para deslindar en la interfaz sintaxis-semántica cuáles serían los elementos sintácticos por un lado y semánticos, por otro, que favorecen la atribución de distintos sentidos a un mismo enunciado.

El autor parte de la premisa de que la distinción entre argumentos y adjuntos que se da en el ámbito del sintagma verbal puede replicarse al interior del sintagma nominal (SN). A partir de allí se propone establecer “cuáles son los factores de índole sintáctico y léxico-semántico que determinan el «alcance» predicativo del adjunto” (Müller, 2000) dentro del SN.

El concepto de alcance predicativo se refiere, usando una metáfora espacial, al área de influencia de un adjunto sobre los otros elementos que componen un SN. Esta relación es equivalente a la que se establece entre el elemento que manda-c y los que están bajo su mando, que fue descrita en la primera parte de este trabajo. Tanto en la relación de alcance como la de mando-c existe un elemento del sintagma que tiene influencia sobre otros.

Müller describe dos tipos de estructuras: las básicas, que son aquellas compuestas solamente por un núcleo nominal y un adjunto, y las compuestas, que son los SSNN expandidos con varios modificadores. Las estructuras básicas no revisten problemas para el análisis ya que es obvio que el adjunto tiene alcance predicativo, solamente, sobre el único núcleo con que cuenta el sintagma. Ahora bien, cuando se presentan estructuras compuestas resulta más complejo establecer el alcance predicativo de cada uno de los adjuntos.

Para explicar el alcance predicativo de los adjuntos, Müller analiza factores como la estructura argumental de los nombres, la referencialidad y las preposiciones que los introducen.

Semántica: Estructura argumental del núcleo

En primer lugar, para abordar el componente semántico analizaremos los efectos que producen sobre la conformación del SSNN el hecho de que los nombres, núcleos, posean o no estructura argumental6.

Los nombres que presentan estructura argumental tienen la capacidad de seleccionar argumentos y asignarles un rol temático, del mismo modo como sucede en el nivel del SV por lo cual estas propiedades semánticas de los núcleos guían la interpretación como veremos en (1):

1)		a.	El jugador lanzó el balón contra los espectadores.
b. Su lanzamiento del balón contra los espectadores.

En (1.b) podemos observar que el núcleo del SSNN, lanzamiento, mantiene la estructura argumental del verbo lanzó (1.a) conformada por dos argumentos cuyos roles temáticos son agente y tema respectivamente. El SN balón satura al argumento , porque cumple con el rol de tema. Queda descartado el SN espectadores como argumento porque está introducido por una preposición con rol temático de locación, lo que impide interpretarlo como agente, por tanto, la única opción es considerarlo adjunto del SSNN lanzamiento del balón:

1)	3	[Su SN1 lanzamiento [del SN2 balón] [contra los SN3 espectadores]]

Tal como muestra (1.3), el SN2 balón y el SN3 espectadores son modificadores del SN1 lanzamiento. El SN2 es complemento del SN1, por lo que su alcance predicativo se restringe solo a dicho SN, mientras que el SN3 tiene un alcance más amplio ya que modifica al SN1 junto a su complemento, el SN2. De este modo, la distinción entre argumentos y adjuntos nos sirve de guía para establecer el alcance predicativo de cada uno de los sintagmas que conforman un SSNN complejo7.

Pero la situación es muy distinta cuando los nombres no poseen estructura argumental, entonces “no imponen ninguna interpretación específica a sus complementos” (Müller, 2000, p. 36) es decir, no le exigen a sus modificadores que cumplan con ningún rol temático en particular, por lo cual tales expansiones solo podrán considerarse adjuntos sintácticos. Este es el caso de los enunciados de (1), (2) y (3), reproducidos en (2):

1)		a.	Botas de piel de niño.
b. Bicicleta de balance para niños de madera.
c. Jabón corporal en barra para niños con forma de hipopótamo.

Los nombres que forman parte de los SSNN de (2), tales como botas, bicicleta, niños o jabón, carecen de estructura argumental, por lo tanto, la única posibilidad es considerar a sus modificadores como adjuntos. El problema que surge es determinar de qué SN dependen para así establecer su alcance predicativo, lo cual influye en la interpretación semántica del enunciado, como formularemos a continuación.

El primer enunciado (2.a) se trata de un SN con una estructura compuesta ya que posee dos modificadores. Como observamos antes, ninguno de los nombres que lo conforman tiene estructura argumental, por lo que concluimos que los modificadores son adjuntos. El siguiente paso del análisis requiere establecer a qué núcleo se adjuntan, para lo cual existen dos posibilidades:

3)		a.	[SN1 Botas [de SN2 piel] [de SN3 niño]]
b. [SN1 Botas [de SN2 piel [de SN3 niño]]]

La primera opción (3.a) es que tanto el SN2 piel como el SN3 niño son adjuntos del SN1botas, por lo cual se puede afirmar que los dos modificadores tienen alcance predicativo sobre el SN1.Esto significa que los SSNN piel y niño acotan el marco de referencia del SN1 botas. De este modo, el análisis coincide con la primera interpretación del enunciado: las botas están hechas de piel y son para niños.

La segunda posibilidad (3.b) es que el SN3 niño tiene alcance predicativo sobre el SN2 piel. Esto implica que el SN3 niños precisa el significado del SN2 piel, o sea, indica qué tipo de piel. Este análisis representa la segunda lectura ambigua: el material que componen las botas es piel, pero no cualquiera sino de una clase, piel de niño. Este efecto de sentido ambiguo es posible dada la falta de estructura argumental de los SN que componen el sintagma.

El segundo enunciado (2.b) es un SSNNN compuesto ya que posee tres modificadores. Solo uno de los cuatro nombres que lo integra posee estructura argumental, balance (pero no la descarga); mientras que los demás, bicicleta, niños, madera, carecen de ella. La ambigüedad surge en torno a la relación del SN madera con su núcleo, para la cual se plantean dos opciones:

4)		a.	[SN1 Bicicleta [de SN2 balance] [para SN3 niños] [de SN4 madera]]
b. [SN1Bicicleta [de SN2 balance] [para SN3 niños [de SN4 madera]]]

En la primera (4.a), los modificadores SN2, SN3 y SN4 son adjuntos del SN1bicicleta, por lo tanto, tienen alcance sobre él. Este análisis representa la primera interpretación semántica: la bicicleta es de balance, está hecha de madera y destinada para el uso de los niños.

En la segunda opción (4.b) el SN4 madera, dada su posición adyacente, se adjunta al SN3, por lo que su alcance se limita a este SN3. Esta representación es compatible con la segunda lectura del enunciado que describe al producto como una bicicleta de balance cuyos usuarios son niños descriptos como de madera.

Tal como los casos anteriores, el enunciado de (2.c) se trata de un SSNN de estructura compuesta, por lo cual surge el interrogante acerca de a qué núcleo sin estructura argumental se adjuntan sus modificadores. Para esto existen, al menos, dos respuestas:

5)		a. [SN1 Jabón [SA corporal] [en SN2 barra] [para SN3 niños] [con SN4 forma [de SN5 hipopótamo]]]
6)		b. [SN1 Jabón [SA corporal] [en SN2 barra] [para SN3 niños [con SN4 forma [de SN5 hipopótamo]]]]

En (5.a) el SN1 jabón posee cuatro modificadores: el SA corporal, los SSNN barra, niños y forma de hipopótamo. Dado que el SN1 carece de estructura argumental todos sus modificadores son adjuntos. Esto indica que cada uno de ellos tiene alcance predicativo sobre SN1. El caso del SN5 hipopótamo es el único modificador adyacente que puede interpretarse como complemento del SN4 forma, por lo que su alcance se limita solo a este SN4. Esto se debe a que puede saturar uno de sus argumentos con rol temático de tema, ya que está introducido mediante una preposición funcional. Esta descripción es compatible con la primera interpretación del enunciado que señala que se trata de un jabón corporal que es sólido, tiene forma de hipopótamo y está destinado a los niños.

En (5.b) el SN4 forma de hipopótamo es modificador del SN3 niños, debido a su adyacencia, su alcance se limita a SN3. De este modo, se puede interpretar que lo que tiene forma de hipopótamo, ahora, no es el jabón, sino los niños.

De esta manera, la carencia de estructura argumental de los SSNN complejos es un factor semántico que luego en la interfaz de derivación sintáctica, al linealizar los adjuntos su alcance predicativo (Müller, 2000) se obtenga más de una interpretación, en función de la ausencia de propiedades semánticas que guíen la interpretación.

Interfaz semántica-sintaxis: determinación de los SSNN

El segundo factor que Müller tiene en cuenta a la hora de analizar el alcance predicativo de los adjuntos dentro del SN, es la determinación de los nombres que lo constituyen. Este hecho influye en su alcance predicativo, e interpretación semántica del enunciado.

Para organizar la explicación el autor mantiene la distinción entre núcleos con y sin estructura argumental y, a partir de allí, analiza el alcance predicativo de los modificadores según esté determinado o no.

En el caso de un núcleo con estructura argumental, el autor considera que el complemento debe estar determinado8 además de saturar un rol temática como el caso de (1.a):

1)  		a.	[La SN1venta [de los SN2libros]].
b. [La SN1venta de SN2libros].

La estructura resultante de (1.a) refiere a dos elementos del mundo extralingüístico: el proceso (la venta) y el conjunto de objetos (los libros). Por el contrario, en (1.b) el SSNN adyacente que satura la estructura argumental del núcleo venta está indeterminado. En este caso, no puede ser considerado complemento, sino que sufre un proceso de incorporación que implica su integración al núcleo formando un predicado complejo que tiene una sola referencia: el proceso de venta. Esto trae como consecuencia un cambio aspectual, la duración del evento se representa ilimitada, sin término alguno.

En el caso de SSNN compuestos con núcleos sin estructura argumental, Müller centra sus observaciones en el efecto que produce la indeterminación en aquellos modificadores que no son adyacentes al SN1:

2) 		a. [El SN1 anillo [de SN2 matrimonio] [de SN3 Helena]]
b. [El SN1 paté [de SN2 hígado [de SN3 cerdo]]]

Müller afirma que cuando el SN3 es determinado tiene alcance predicativo sobre el SN1 y su modificador SN2. Así en (2.a) Interpretamos dos referencias, un objeto, anillo de matrimonio, y una persona. En cambio, cuando el SN3 es indeterminado su alcance se reduce al SN2 lo que produce el efecto de concretar su marco de referencia. En razón de ello en (2.b) solo interpretamos una referencia a un único objeto el pate de hígado de cerdo, estos últimos SN predican características del paté, no entidades independientes en la realidad extralingüística.

Esto explica por qué son posibles las interpretaciones representadas en (3.b), (4.b) y (5.b), reproducidas en (6):

6)		a. [SN1 Botas [de SN2 piel [de SN3 niño]]]
b. [SN1Bicicleta [de SN2 balance] [para SN3 niños [de SN4 madera]]]
c. [SN1 Jabón [SA corporal] [en SN2 barra] [para SN3 niños [con SN4 forma [de SN5 hipopótamo]]]]

En (6.a), dado que el SN3 niño es indeterminado puede predicarse del SN2 piel que está adyacente, lo que habilita al hablante a interpretar que el material que compone las botas es piel proveniente de niños.

En (6.b) ocurre el mismo proceso: la indeterminación del SN4 madera puede limitar su alcance predicativo al SN3 niños, que se encuentra en una posición adyacente. Esto permite interpretar que la bicicleta está destinada a niños caracterizados como de madera.

En (6.c) el SN4 forma de hipopótamo, además de estar indeterminado, se encuentra adyacente al SN3 niños, por lo que su alcance predicativo puede abarcar a este SN3. Este esquema es compatible con la interpretación de que son los usuarios, cuya forma se asemeja a la de un hipopótamo.

De tal manera podemos afirmar que además de la falta de estructura argumental de los núcleos del sintagma, la indeterminación de los SN que constituyen los adjuntos son dos factores que favorecen en el orden lineal de concatenación del sintagma la posibilidad de interpretaciones ambiguas.

Preposiciones que introducen a los modificadores

Otra cuestión que analizaremos es el tipo de preposición que introduce a los modificadores del SN. Este es el tercer elemento que analiza Müller para determinar el alcance predicativo de los adjuntos. Siguiendo la hipótesis del paralelismo entre el SV y el SN, Müller afirma que, así como los sintagmas preposicionales adjuntos al SV pueden expresar numerosos contenidos semánticos, lo mismo ocurre dentro del SN: “aparentemente es posible expresar cualquier contenido semántico dentro de un SN por medio de SSPP” (Müller, 2000, p. 51). Para este propósito las preposiciones léxicas son las más adecuadas ya que, además, de asignar caso, designan rol temático a sus argumentos, lo cual guía la interpretación semántica de los mismos.

Sin embargo, en muchos ejemplos, los modificadores son introducidos por preposiciones funcionales, vaciadas de contenido semántico. Esto implica que pueden asignarle caso a sus argumentos pero no rol temático, por lo tanto, no ofrecen una guía para interpretarlos semánticamente. Una de las preposiciones funcionales más utilizadas para introducir modificadores dentro del SN es de. Si bien en algunos usos aporta los roles temáticos de origen o poseedor a veces materia, en otros no aporta rol alguno, lo cual le permite “establecer una asociación léxicamente imprecisa e indeterminada entre dos representaciones léxicas de entidades” (Müller, 2000, p. 52).

Müller afirma que hay una correlación entre la estructura argumental del núcleo del SN y el tipo de preposiciones que introducen a sus modificadores: cuando el núcleo tiene estructura argumental sus argumentos son introducidos por la preposición funcional de, mientras que a sus adjuntos los introducen preposiciones léxicas. En los casos donde el núcleo del SN no tiene estructura argumental, en general, sus adjuntos son introducidos por la preposición de funcional. Por lo tanto, no existe la guía de los roles temáticos para su interpretación, lo cual posibilita que los enunciados puedan derivar estructuras con lecturas ambiguas. Como en el caso de los enunciados (1) y (2) del corpus.

De forma análoga ocurre con la preposición con. En algunos usos esta preposición asigna a sus argumentos los roles temáticos de coagente, comitativo, causa o instrumento, pero ellos, derivan de un rol que aporta una idea más general: con-comitancia, (Lehmann & Min Shin 2005) es decir, la noción de dos elementos que coexisten al mismo tiempo. Este rol general de la preposición con es el que se puede detectar en el ejemplo de (3). La no asignación de un rol temático más definido explica el motivo por el cual es posible interpretar que el SSNN4 forma de hipopótamo modifique tanto a SN1 jabón como al SN3 niño.

La distinción entre preposiciones léxicas y funcionales también explica por qué los modificadores introducidos por preposiciones funcionales ofrecen posibles interpretaciones ambiguas a los hablantes.

Semántica- léxica: Estructura Qualia

Un último aspecto semántico, que podemos considerar pertinente es la estructura Qualia, en aquellos casos donde los recursos del sistema de la lengua que guían la interpretación semántica resultan insuficientes: núcleo carente de estructura argumental, o adjuntos indeterminados o conectados mediante preposiciones funcionales. En tal sentido, pareciera, entonces, que la interpretación ha quedado bajo el criterio del hablante; dado que semánticamente las relaciones establecidas entre los SSNN no poseen rasgos inherentes.

Sin embargo, los aportes de Pustejovsky pueden mitigar este supuesto. La idea del autor es que cualquier nombre contiene ciertas características léxicas que lo hacen apto para integrarse en algunas construcciones y no en otras. Él propone un sistema al que denomina Qualia – Estructure (Estructura Qualia, de ahora en más EQ) que permite organizar el contenido léxico de cualquier nombre en cuatro categorías o rasgos:

FORMA: lo que distingue a un objeto de otro (posición, dimensión, color, forma).
CONSTITUCIÓN: la relación entre un objeto y sus partes o a la entidad a la que pertenece (material, peso, componentes).
FUNCIÓN: propósito, objetivo de la entidad.
ORIGEN: factores que intervienen en su origen o producción (si es natural o construido)

El uso de esta conceptualización teórica puede ser de utilidad para explicar las relaciones semánticas entre el núcleo y sus modificadores que implican el conocimiento enciclopédico del hablante o la incidencia del cotexto, de un modo más preciso. Una forma de aplicar este concepto es estableciendo qué categorías de la EQ del núcleo de un SN son activadas por su modificador. Veamos esto aplicado a los ejemplos del corpus:

La ambigüedad estructural del enunciado de (1), que contiene SSNN sin estructura argumental, indeterminados y relacionados por preposiciones funcionales, puede explicarse a través de la EQ del núcleo que se activa en cada interpretación:

1)		a. [SN1 Botas [de SN2 piel] [de SN3 niño]]
b. [SN1 Botas [de SN2 piel [de SN3 niño]]]

En el ejemplo de (1.a) el modificador SN3 niño activa el componente [FUNCIÓN] del SN1 botas, por lo cual es posible interpretar que las botas son para el uso de los niños. En (1.b) el modificador SN3 activa el componente [CONSTITUCIÓN] de su núcleo, el SN2 piel, por lo que es posible leer que la piel con la que están fabricadas las botas es de niño. El hecho de que los SSNN estén introducidos por la preposición funcional de, que no aporta rol temático, permite la activación en dos rasgos [FUNCIÓN] para SN1 y otro rasgo [CONSTITUCIÓN] para SN2, ambos nombres indeterminados y sin estructura argumental. En este caso, mediante la EQ se puede explicar el componente de rasgos semánticos del propio léxico que favorece la ambigüedad estructural de este enunciado, estableciendo una vinculación semántica con dos posibles núcleos, dada la indeterminación de ambos nombres.

En el caso de (2)

2)			a. [SN1 Bicicleta [de SN2 balance] [para SN3 niños] [de SN4 madera]]
b. [SN1 Bicicleta [de SN2 balance] [para SN3 niños [de SN4 madera]]]

El SN4 madera, introducido por la preposición funcional de sin rol temático, puede activar el componente [CONSTITUCIÓN] tanto del SN1 bicicleta (2.a) como del SN3 niños (2.b) porque ambos son nombres concretos e indeterminados. De este modo comprobamos en (2), que los rasgos de la EQ del léxico, en cotexto de SN indeterminados y ante la falta de estructura argumental puede activar el mismo rasgo para más de un SN.

El funcionamiento de la EQ del léxico de (2) es similar al de (3):

3)			a.	[SN1 Jabón [SA corporal] [en SN2 barra] [para SN3 niños] [con SN4 forma [de SN5 hipopótamo]]]
b. [SN1 Jabón [SA corporal] [en SN2 barra] [para SN3 niños [con SN4 forma [de SN5 hipopótamo]]]]

El SN4 forma de hipopótamo introducido por la preposición con funcional, sin rol temático alguno, activa el componente [FORMA] tanto en el SN1 jabón (3.a) como en SN3 niños en (3.b) ambos, también, indeterminados y nombres concretos.

En los tres casos el recurso de la EQ permite explicar las relaciones ambiguas que pueden establecerse entre dos proyecciones léxicas caso (1) porque activa el mismo rasgo para vincular un modificar a más de un núcleo o porque activa más de un rasgo en la relación del modificador con distintos SN, caso (2) y (3).

Estas relaciones entre proyecciones léxicas, cuyos núcleos sin estructura argumental, indeterminados, y con modificadores introducidos mediante preposiciones funcionales configuran la interfaz semántico sintáctica. A esta interacción entre dos niveles de lengua se suma el factor semántico de la EQ del léxico en los SN. Esto hace que la información de la que dispone el receptor para establecer una interpretación inequívoca de los enunciados resulte insuficiente. Por ello, en la linealización del sintagma, la relación estructural de sus constituyentes resulta ambigua.

Conclusión

Como primera conclusión pretendemos argumentar que la ambigüedad estructural resulta de la interacción en el proceso de linealizar una cadena sintagmática en su derivación. Esta interfaz entre orden jerárquico y orden lineal es una “frontera común” (Bosque, 2011, p.683) entre un nivel y otro de lengua. Esta interfaz permite que fenómenos de un nivel produzcan efectos en otro nivel (Bibiloni 2020). En este trabajo nos hemos propuesto mostrar cómo interactúan en el alcance predicativo de los adjuntos dentro del SN los factores semánticos: la presencia/ausencia de estructura argumental de los núcleos, su determinación/ indeterminación en el caso de SSNN y las preposiciones que los introducen en la interfaz de la linealización del orden jerárquico de una derivación. Estos factores adquieren preponderancia, sobre todo, cuando los SSNN constituyen estructuras compuestas, o sea, cuando presentan varias expansiones, porque el orden lineal es crucial para comprenden las relaciones jerárquicas entre núcleos y adjuntos.

El primer factor semántico que desarrollamos, la estructura argumental de los nombres, permite distinguir si los modificadores son complementos del núcleo o adjuntos, lo que tiene vinculación directa con el alcance predicativo de los mismos (interfaz semántica- sintáctica): los complementos tienen un alcance limitado, ya que solo modifican a los núcleos, mientras que los adjuntos tienen un alcance más amplio porque poseen mando de constituyente sobre toda la cadena. En tal sentido el orden lineal permite interpretar la jerarquía sintáctica.

En el caso de que el núcleo nominal no contara con estructura argumental, solo cabe considerar a sus modificadores como adjuntos, tal como sucede en los enunciados del corpus, ejemplificamos con (3) donde el modificador SN4forma de hipopótamo puede adjuntarse tanto al núcleo SN1 jabón como a SN3 niños. La ausencia de estructura argumental no delimita el alcance predicativo de los adjuntos del sintagma en el orden jerárquico entonces postulamos que sería un factor en el proceso de la interfaz de la derivación lineal del sintagma que produciría la ambigüedad estructural. Porque la manifestación de dicha jerarquía solo es interpretable por medio del orden lineal.

El segundo factor (interface sintáctica-semántica), la determinación de los SN que constituyen los adjuntos que forman parte de un SN compuesto influye en el alcance predicativo del adjunto. Los SSNN determinados tienen un alcance predicativo amplio porque pueden abarcar al núcleo y a sus complementos, mientras que los SSNN indeterminados tienen un alcance local, ya que, por lo general, su área de influencia se limita a los SSNN adyacentes. Como en el corpus, ejemplificamos con (2), se puede apreciar el comportamiento del SN4 madera que es indeterminado y por ese motivo puede interpretarse dependiente del SN3 niño que está adyacente. Este factor sintáctico- semántico ausencia de determinación en los SN induce a una interpretación más local de las relaciones del alcance del mandoc en la estructura lineal, produciendo el efecto ambiguo sobre sus relaciones jerárquicas.

El tercer factor, el tipo de preposiciones que introducen a los adjuntos, que por medio de expansiones del núcleo pueden expresar diversos contenidos léxico-semántico. En los SSNN compuestos cuyo núcleo posee estructura argumental, la preposición funcional de introduce a los complementos mientras que las preposiciones léxicas suelen hacerlo con los adjuntos.

En los SSNN con núcleo sin estructura argumental, los adjuntos introducidos por preposiciones funcionales, que no ofrecen un rol temático, restringen su alcance predicativo a su entorno más adyacente. Estas son interpretadas como una caracterización del nombre que en el orden lineal las precede, aportando alguna información semántica para su individualización. Así sucede en los casos del corpus, como ejemplo: en (1) donde el SN3 niño, introducido por la preposición funcional de, puede activar al menos dos rasgos, según la estructura Qualia del nombre. De modo tal que esta frontera común de la interface orden de palabra – sintaxis resulta permeable bajo las condiciones de indeterminación de los SN, sin estructura argumental, a las propiedades semánticas de las proyecciones del léxico, es decir la Estructura Qualia pueden invadir la frontera común con más de un rasgo o activar relaciones semánticas para más de un núcleo. Estas hipótesis explicarían la posibilidad de la ambigüedad de los enunciados analizados.

En este estudio nos hemos propuesto mostrar como interactúa para determinar el alcance predicativo de los adjuntos dentro de los SSNN, tres factores dos de tipo semántico presencia /ausencia de estructura argumental y Estructura de Qualia en los SN, y un factor sintáctico/pragmático, determinación/indeterminación de los constituyentes adjuntos. Por último, la guía para la interpretación de las relaciones jerárquicas que pueden ofrecer los tipos de preposiciones es crucial en los SSNN con varías expansiones. Sin estos anclajes para la interpretación de las dependencias sintácticas, estas quedan libradas a la linealidad del discurso.

En este sentido en lo general podría postularse la independencia de ambos órdenes, jerárquico y lineal, en la derivación sintáctica del discurso. En función de ello, luego, sería necesario focalizar las restricciones a las que están sometidos estos órdenes en la “frontera común” de su interfaz y así delimitar si las mismas son idiosincráticas del español o podrían tener, tal vez , algún tipo de validez universal.

Notas

  1. Disponible en https://www.dopl3r.com/memes/graciosos/botas-de-piel-de-nino-75e/406784
  2. Disponible en https://www.cuantarazon.com/924642/pinocho
  3. Frase coloquial: “Talento o disposición natural de las personas para determinada actividad” https://dle.rae.es/%20madera%20?m=form La lectura de la expresión “ser de madera” ha adquirido un significado connotativo. A través de un proceso metonímico se nombra el todo (la madera) para referirse a una parte de ella, su dureza. De esta manera, aplicada a las personas, la frase “ser de madera” ha adquirido el significado de rigidez y/o torpeza en la realización de determinados movimientos. La expresión “ser de madera” connotativamente hace referencia a la torpeza en la motricidad o dificultad en la ejecución de cierta actividad. Por tanto, es posible interpretar que “niños de madera” quiere decir que los niños a quienes está dirigido el producto carecen de habilidades para andar en bicicleta.
  4. Disponible en https://www.dopl3r.com/memes/qpdo/flame-jabon-corporal-en-barra-para-ninos-con-forma-de-hipopotamo/249561
  5. La cita de Moreno Cabrera fue tomada de Bibiloni (2020, p. 30).
  6. En gramática generativa se denomina “estructura argumental” a la estructura que refleja el número de argumentos requeridos por una unidad léxica, particularmente un verbo, así como los papeles temáticos o semánticos que asignan a cada uno de esos argumentos. Estructura argumental (e.a.) es definida en términos de valencia por L. Tesnière (1994) como “el número de actantes que [un verbo] es susceptible de regir” (p. 411). Hale & Keyser (1993) identifican estructura argumental con las proyecciones sintácticas de un núcleo léxico.
  7. Es necesario tener una cuenta que, a diferencia del SV, el SN no tiene obligación de saturar su estructura argumental, por lo que, aunque posea estructura argumental, es posible que ninguno de sus complementos cumpla con los roles temáticos disponibles.
  8. Las lenguas que poseen determinantes (artículos y/ o pronombres) lo utilizan para restringir y definir la referencia de los sintagmas nominales (SSNN) es decir la relación semántica entre estas expresiones y las entidades a las que los hablantes designan, porque están de alguna manera presentes en el universo del discurso (Leonetti,1999).

Referencias

Alvaraz Varó y Martínez Linares (2008)[1978] . Diccionario de Lingüística Moderna. Buenos Aires: Planeta.

Bibiloni, E. (2020). “La materialidad en el lenguaje - trabajo inédito.

Bosque, I. (2011). Fundamentos de Sintaxis Formal. Madrid: Akal.

Hale, K. & Keyser J. (1993) “On argument structure and the lexical expression of syntactic relations”. En Hale, K. & S.J. Keyser, eds. The view from Building 20: Essays in honor of Sylvain Bromberger. Cambridge. MIT Press pp 53-109

Hjelmslev, L. (1944) [1972]. “Lingüística Estructural” en Ensayos Lingüísticos. Madrid: Gredos.

Leonetti, M. (1999). “El Artículo” en Gramática Descriptiva de la Lengua Española Tomo 1. Madrid: Espasa Calpe.

Lehmann & Yong Min Shin (2005). The functional domain of concomitance en https://www.christianlehmann.eu/publ/Concomitance.pdf

Moreno Cabrera, J. C. (1991, 1994). Curso Universitario de Lingüística General. Dos volúmenes. Madrid: Síntesis.

Muller, H. H. (2000). “Los adjuntos como componentes del sintagma nominal” en Revue Romane 35-1, 36 -54.

Pustejovsky, J. (1995). The Generative Lexicon. Cambridge; London: MIT Press.

Reinhart, T. M. (1976). The Syntactic Domain of Anaphora. Massachusetts Institute of Technology. Disponible en http://dspace.mit.edu/handle/1721.1/16400

Saussure, F. [1916] (2005). Curso de Lingüística General. Buenos Aires: Losada.

Tesnière, L. (1994). Elementos de sintaxis estructural. Madrid: Gredos.


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